Jueves 

י"ח אדר ב’ התשפ"ד

Jueves

י"ח אדר ב’ התשפ"ד

חיפוש בארכיון

Capítulo 11, “Aspectos de la limpieza”, (parte treinta y cinco) – 130

Con respecto al enojo dijeron: “Todo el que se enfurece lo considerarás como un idólatra”.

Con referencia a la envidia y el deseo estudiamos claramente: “La envidia, el deseo y la honra quitan al hombre de este mundo” (Trat. Princip. 4). Pero para sustraernos debemos estudiarlas y sus manifestaciones pues son como las plantaciones desviadas de la vid. Y comenzaremos a hablar de ellas de una en una.

La definición del orgullo es: que el hombre se da importancia a sí mismo y cree y siente que él merece la honra. Esto puede provenir por distintos motivos; hay quien se considera a sí mismo inteligente, otros hermosos, respetables, eminentes o sabios.

En conclusión, cuando el hombre piensa que está coronado con algunas de las virtudes de este mundo corre el peligro de caer en la fosa de orgullo.

 

R. Moshe Jaim Luzzatto Z"L TRADUCIDO AL CASTELLANO POR EL RABBI ISAAC FADDA.

"El sendero de los rectos es apartarse del mal; el que guarda su alma preserva su camino." (Mishle 16:17)