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י"ח אדר ב’ התשפ"ד

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Mitzva 110) Prohibición de reproducir el sahumerio según la fórmula establecida por la Torá

Parashat Ki tisá

“… en su proporción no harán otro igual a él…” (Shemot 30,37)

Mitzva prohibitiva de hacer un sahumerio como el preparado para ser quemado en el Altar de oro del Santo Templo, la prohibición es únicamente en caso de realizar exactamente la misma mezcla con las mismas cantidades que se hace en el Santo Templo con la intención de utilizarlo para fines personales como dice el versículo “esas cantidades no harán para ustedes”, y luego agrega “el hombre que haga como él para oler a Hashem” es decir que su intención sea el provecho personal.

El fundamento de la mitzva es lo mismo explicado en la mitzva prohibitiva de unción con el aceite especifico del Gran Templo (mitzva 108) engrandecer y enaltecer la Casa de Hashem y todo lo que hay en ella, ya que al prohibir al pueblo preparar uno semejante y utilizarlo lo apreciarán mucho más, siendo que el valor de las cosas se establece en el corazón de las personas en relación a la accesibilidad con la que las alcanzan).

Las leyes de esta mitzva establecen que quien prepara este sahumerio para practicar, para perfeccionarse para hacer para el servicio divino o para vender al público estará exento del castigo (de igual modo está prohibido hacerlo). Sin embargo, quien prepare para uso personal, incluso una cantidad mínima, sí lo hace de acuerdo a las mismas cantidades del sahumerio del Santo Templo será castigado.

    Se debe cumplir esta mitzva en todo tiempo y lugar, tanto por hombres como por mujeres. Quien prepare el sahumerio utilizando las mismas cantidades con las que se prepara en el Santo Templo transgredirá esta mitzva, en caso de hacerlo adrede será castigado con Karet, mientras que beshogueg, que es por equivocación pensando que está permitido o que estas no son las cantidades prohibidas, deberá acercar un sacrificio del Jatat.

"El Rabi Simlai dijo: seiscientos trece mandamientos se le han comunicado a Moisés. Trescientos sesenta y cinco prohibiciones equivalentes al número de los días del sol, y doscientos cuarenta y ocho preceptos a cumplir, correspondientes a los miembros del cuerpo humano." (Tratado Makot 20: )