Mitzva 147) Prohibición de comer sebo (jéleb)
Parashat Tzav
“Todo sebo de toro, oveja o cabra no comerán”. (Vayikrá 7,23)
Mitzva que prohíbe comer cebo del animal puro, como dice el versículo “todo sebo de toro, oveja o cabra no comerán”.
El fundamento de la mitzva es lo que ya fue explicado, que siendo el cuerpo un instrumento para el alma, a través del cual la persona realiza sus buenas acciones, y al ser que como resultado de su limpieza y rectitud este cuerpo se subyugará al camino de su reflexiva alma, insuflada en él, creyendo en ella, y conduciéndose de acuerdo a su consejo, necesita la persona esforzarse en la pureza de su cuerpo, para establecerlo en su rectitud y fortaleza. Por ello, de las grandes bondades del Creador para con nosotros, su pueblo elegido, que nos alejó de todo alimento que dañe al cuerpo y hace nacer en él flujos malos, y entre ellos el sebo, que es sabido que genera estos flujos malos.
Se debe cumplir esta mitzva en todo lugar y tiempo, tanto por hombres como por mujeres. Quien ingiere adrede la cantidad de kazait de sebo será castigado con latigazos, y si lo hace por error deberá acercar un sacrificio del pecado fijo (Jatat kavua).