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Mitzva 250) Prohibición de hacer pronósticos adivinatorios

Parashat Kedoshim

“No creerán en pronósticos” (Vaykrá 19,26)

Mitzva prohibitiva de hacer pronósticos adivinando el tiempo para llevar a cabo acciones específicas, por ejemplo, fijar un tiempo para una acción o evento determinado diciendo: tal momento es apropiado para tal acto y quien lo haga en ese momento con seguridad tendrá éxito, por el contrario, quien lo hace en tal otro momento con seguridad fracasará, como pronostican los que hacen brujerías, como dice el versículo “no creerán en pronósticos”.

Dijeron nuestros sabios de bendita memoria que se incluye en esta prohibición hacer determinados trucos de magia que se realizan por medio de la rapidez de movimientos de manos hasta que hacen parecer a los espectadores que el mago hace cosas espectaculares en contra de las leyes naturales, como poner un hilo en una de las mangas de sus ropas y sacar por la otra una víbora, y trucos de ese estilo, y quien los haga será castigado con latigazos.

El fundamento de esta mitzva es que por ser que estas cuestiones son cosas sin sentido lógico alguno, al pueblo santo, elegido por el Creador no le es digno de hacerlas, y menos aún de ´conducirse´ de acuerdo a ellas, siendo que son especulaciones infundadas y mentirosas. Por otro lado estas son cosas que apartan a la persona de la creencia en Hashem Bendito Sea, y de su santa Tora y la ponen en riesgo de terminar renegando de la única y absoluta verdad, Hashem no lo permita, ya que finalmente terminará adjudicando todo lo que le sucede, tanto lo bueno como lo malo, a la simple casualidad y a las influencias positivas o negativas de los momentos en el tiempo en los actos, renegando de la meticulosa Supervisión Divina, que es uno de los principios básicos y fundamentales del judaísmo. Por otro lado, las prácticas de magia tienen consecuencias negativas ya que tienen el riesgo de que hacen que la gente piense que esos actos que en realidad son imposibles de realizar, en realidad sí son posibles, y creerán que está en las capacidades de las personas hacer milagros en contra de las leyes de la naturaleza y que los milagros no están exclusivamente en las manos de Hashem, pensamiento que reniega de un principio fundamental del judaísmo, motivo por el cual se cortará su alma.

Se debe cumplir esta mitzva tanto por hombres como por mujeres en todo tiempo y lugar. Quien diga a la gente que hay tiempos específicos para que determinadas acciones sean exitosas, y también él realiza sus acciones en esos momentos creyendo que solo entonces prosperarán habrá transgredido esta mitzva y será castigado con latigazos. Asimismo, la persona que pregunta y realiza sus acciones en momentos determinados de acuerdo a las respuestas que le dan, será castigado con latigazos.

 

"El Rabi Simlai dijo: seiscientos trece mandamientos se le han comunicado a Moisés. Trescientos sesenta y cinco prohibiciones equivalentes al número de los días del sol, y doscientos cuarenta y ocho preceptos a cumplir, correspondientes a los miembros del cuerpo humano." (Tratado Makot 20: )