Jueves 

י"ח אדר ב’ התשפ"ד

Jueves

י"ח אדר ב’ התשפ"ד

חיפוש בארכיון

Mitzva 421) Precepto del tefilín del brazo

Parashat Vaetjanán

“Y las atarás como señales sobre tu brazo…” (Devarim 6,8)  

Mitzva prescriptiva de atar el Tefilín del brazo en su lugar, como dice el versículo “y las atarán como señales sobre tu brazo…”. La mitzva consiste en atar al brazo cuatro párrafos de la Torá, y a este conjunto de parashiot llamó la escritura Tefilín cuando están conectadas a cintas. Los cuatro párrafos son, dos del final de la lectura de parashat Bo, “Kadesh li kol bejor” y “vehaia ki ieviaja”, el tercero es el que se encuentra en el final de parashat vaetjanan que es “Shema Israel hasta uvisheareja”, y el cuarto se encuentra en el final de parashat ekeb, que es desde “veaia im shamoa tishmeu hasta kimei ashamaim al haaretz”.

Se deben escribir los cuatro párrafos en un mismo pergamino, luego se lo enrolla como a un Sefer Torá desde el final al principio, y se lo pone en un recipiente de cuero, al cual se le pasará en su extremo una cinta por medio de la cual se atará finalmente este recipiente de cuero que contiene las cuatro parashiot, que es lo llamado por todos Tefilín de la mano, al brazo izquierdo. Debe ser atado al brazo de manera tal que quede apuntando en dirección al corazón.

El fundamento de la mitzva es que al ser la persona de materia naturalmente se arrastra detrás de los placeres materiales porque así es la naturaleza de la materia buscar el placer, como lo observamos en la actitud del caballo o una mula que no tienen lógica y actúan solo movilizados por sus impulsos naturales, y sino fuera por nuestra alma que nos obsequió Hashem que nos impide, según sus fuerzas, caeríamos en el pecado. Y por cuanto que el alma reposa dentro del cuerpo material en este mundo, que es el lugar del cuerpo, alejada de los cielos que es su lugar de pertenencia, no le es fácil doblegar a los deseos del cuerpo, por lo que necesita muchos cuidadores que la protejan. A tal fin el creador, bendito sea, quien desea meritarnos con santidad, nos encomendó establecer fuertes y potentes protectores cerca de ella, que son ciertas mitzvot: la mitzva de estudio de Torá, sobre la que fuimos encomendados a no interrumpir nuestras bocas del estudia de Tora ni de día ni de noche, la mitzva de Tzitzit poniendo cuatro tzitziot en las cuatro puntas de nuestras ropas, la mitzva de Mezuza poniendo Mezuza en los portones de nuestras moradas y la mitzva de Tefilín de la mano y la cabeza, todas ellas nos recuerdan y no nos permiten desviarnos y dirigirnos detrás de nuestros ojos y de los malos pensamientos del corazón.

Las leyes de la mitzva establecen que se debe atar el Tefilín de la mano sobre el bíceps, que es el musculo que esta entre en codo y el hombre, de manera tal que al acercar el brazo al cuerpo quede el Tefilín como mirando hacia el corazón, cumpliendo así lo que dice el versículo “y estarán estas palabras sobre tu corazón…”.

Quien no se pone el Tefilín de la mano y de la cabeza habrá anulado ocho mitzvot prescriptivas, ya que en cuatro lugares fuimos encomendados a estas dos mitzvot.

"El Rabi Simlai dijo: seiscientos trece mandamientos se le han comunicado a Moisés. Trescientos sesenta y cinco prohibiciones equivalentes al número de los días del sol, y doscientos cuarenta y ocho preceptos a cumplir, correspondientes a los miembros del cuerpo humano." (Tratado Makot 20: )