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Mitzva 479) Precepto de caridad (Tzedaká).

Parashat Ree

“Abrir abrirás tu mano para él…”.(Devarim 15,8) 

Mitzva prescriptiva de hacer tzedaka con quien la necesite con alegría y buen corazón. Es decir, que entreguemos nuestro dinero a quien le haga falta y que apoyemos al pobre en todo lo que necesite para su subsistencia con todas nuestras fuerzas, como dice el versículo “Abrir abrirás tu mano para él…”. Explicaron nuestros sabios de bendita memoria que del hecho que la Torá repitió la palabra abrir se aprende que se debe extender la mano al necesitado incluso unas cuantas veces.

El fundamento de la mitzva es que quiso el Creador, Bendito Sea, que sus creaciones aprendan y se acostumbren a las cualidades de benevolencia y de misericordia, porque estas son cualidades dignas de ser alabadas y por medio de las que las personas alcanzan ser merecedores de recibir las bondades de Hashem, y cuando Hashem beneficia a los buenos, alcanza cumplir su voluntad que es la de beneficiar siempre.

Las leyes de la mitzva establecen lo que dijeron nuestros sabios de bendita memoria que la manera óptima de cumplir esta mitzva es dando la plata de Tzedaka al encargado de la sinagoga o de la ciudad de la misma para que él la reparta entre los necesitados, ya que de entregarla el benefactor mismo el pobre se avergonzará de él cada momento que lo vea, en cambio por medio de que se la entregue a un tercero y no sepa a quien este la destinará no se avergonzará el pobre, ya que no sabe de quien la recibió y tampoco él lo podrá avergonzar, ya que no sabe quien recibió lo que dio.  

  Esta mitzva se debe cumplir incluso con personas ricas cuando estas lo necesiten, por ejemplo en caso que se encuentren en un lugar donde la gente no lo conoce o incluso en su ciudad, donde sí lo conocen ocurre a veces que necesitan dinero o cualquier otra cosa prestada que está en las manos de otro por cuestión de enfermedad u otra contingencia que se les presente, y que no la encuentran en ningún otro lugar, entonces la mitzva de tzedaka obliga a asistir su necesidad, porque la Torá elige siempre la cualidad de hacer beneficencia con el prójimo, por lo que nos encomienda a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar a cumplir los deseos y voluntades de la creaciones hijos del pacto con Hashem. La generalidad del asunto es que todo quien le provoca un provecho a su compañero tanto sea en asuntos de dinero, alimentos o cualquier otra necesidad, incluso solo con palabras cálidas o de consuelo, se incluye en la mitzva de tzedaka, y su pago es muy grande.

Dijeron nuestros sabios de bendita memoria que ninguna persona llegará a la pobreza por aumentar en la mitzva de tzedaka, como dice el versículo “y es el acto de tzedaka paz”. Y el pueblo de Israel no será redimido de su exilio, sino por el mérito de la mitzva de tzedaka, como dice el versículo: “Tzion será redimida del juicio y sus prisioneros con tzedaka”. 

Se debe cumplir esta mitzva tanto por hombres como por mujeres, en todo tiempo y lugar. Quien no hace tzedaka en el momento que lo solicitaron de él o que entendió que era necesario y estaba en su capacidad hacerlo, habrá transgredido esta mitzva.

"El Rabi Simlai dijo: seiscientos trece mandamientos se le han comunicado a Moisés. Trescientos sesenta y cinco prohibiciones equivalentes al número de los días del sol, y doscientos cuarenta y ocho preceptos a cumplir, correspondientes a los miembros del cuerpo humano." (Tratado Makot 20: )