Sección 3, capitulo 2 «Sobre la utilización de los nombres sagrados y la hechicería» (parte once) /158
7] Sobre esta base es que el hombre se halla en capacidad de utilizar la materia por medio de las fuerzas espirituales -como los citamos más arriba- y realizar cosas con su palabra que le es imposible realizar por medios físicos.
Todo esto es debido a que Dios determino los sistemas y patrones de la existencia de manera que se interrelacionen mutuamente, empero todos dependiendo de la influencia Divina; por lo que al transmitirse una influencia por medio de uno de Los Nombres Divinos, se producirá un efecto que continuará hasta finalizar el proceso, pues Dios, Bendito Sea, responderá a quien lo reclame por ese nombre, ya que así Él lo decidió e instituyo; e iluminará con la Luz particular y transmitirá la influencia especifica de la que depende la existencia de cada cosa, hasta concluir el nivel físico final.