Sección 3, capitulo 3 «La inspiración Divina y la Profecía » (sexta parte) /171
La revelación de la Gloria Divina es el origen de toda transmisión profética. A partir de allí se transmitirán al poder de imaginación del alma del profeta, las formas e imágenes necesarias para la revelación; empero esta revelación no se inicia como un proceso propio.
Estas imágenes generaran ideas e información cuya concepción es la revelación de la Gloria Divina. Y todo esto permanecerá impreso en la mente del profeta y aun al regresar a su estado humano conservará dicha comprensión con absoluta claridad.
Este es el concepto general de la profecía que ataña a todos los profetas y posee numerosos niveles, como lo aclararemos más adelante, con la ayuda de Dios.
Empero por sobre todos estos grados de profecía se halla el nivel alcanzado por Moisés, nuestro maestro, de quien testimonia la misma Tora: «No se erguirá otro profeta en Israel como Moisés, quien conoció a Dios frente a frente» (Deuter. 34,10).