Parashat Mishpatim
“A una hechicera no dejaras vivir…” (Shemot 22,17)
Mitzva prohibitiva que establece que cuando se encuentra una hechicera se la juzgue y de encontrársela culpable no se la deje vivir, sino que se la condene a la pena de muerte, como dice el versículo “a una hechicera no dejaras vivir”. Este castigo se deberá aplicar a hechiceros tanto hombres como mujeres, solo que la Tora se expresó en femenino porque es más frecuente este tipo de asuntos en mujeres.
El fundamento de esta mitzva es por un lado que es sabido que el asunto de los hechizos es muy malo, y provoca grandes tropiezos a las personas, pero el principal motivo por el que la Tora ordenó exterminar a quien lo practique es que va en contra de la voluntad y el plan del Creador en el mundo, ya que lo creó para ser habitado y estableció en él leyes naturales para conducirlo, y el hechicero procura con sus brujerías quebrantar estas leyes, por lo que Hashem lo prohibió y encomendó a castigarlo.
Se debe cumplir esta mitzva de exterminar a los hechiceros, que solo se cumple en la tierra de Israel, por hombres, jueces expertos capacitados para juzgar asuntos de pena de muerte que conformen un Beit Din de 23 jueces. El Beit Din, que, a pesar de estar capacitado, no juzgue estos asuntos habrá transgredido una mitzva prohibitiva.